Hay quien dice, y dice bien, que en la vida las excusas no merecen la pena, y menos aún en este oficio de narrar y escribir, donde ante todo hay que hacer acopio de honestidad. Por eso simplemente apuntaremos que el tiempo ha sido más rápido que nosotros mismos. Desde aquí pedimos disculpas por el retraso en las publicaciones, sobre todo a los más fieles, a quienes —sabemos que es así— aguardan con interés una nueva entrega de esta edición coleccionable. Pero ya está aquí, el calendario agrícola de San Isidoro para colorear regresa a Leotopía. Y con él una pizca de la historia de León, de aquellos siglos medievales en los que el románico campaba a sus anchas dejando huellas imborrables en el arte y en el alma de quienes eran capaces de leer más allá de la piedra y sus fronteras.
Ahora, cuando el verano encara sus días finales, nosotros volvemos al principio para retomar la publicación del primero de sus meses, el de junio, que en el calendario isidoriano está representado con la escena de la recogida del cereal. O mejor dicho, y tal como plantea Ricardo Puente en su obra Calendarios Medievales (León, 2009), quizás asistimos a una realidad previa: la de la siega de la hierba.
EL CALENDARIO AGRÍCOLA DE SAN ISIDORO PARA COLOREAR: JUNIO
En el calendario agrícola de San Isidoro para colorear hemos puesto especial atención a la hora de corregir un detalle: el mes de junio no solo pone a prueba la pericia del observador al interpretar lo que ven sus ojos, sino también —y lamentablemente esto es algo irrecuperable—, nos muestra el mayor daño sufrido en el conjunto. Un desconchón en la pared interna del arco del Panteón Real ha desgajado el rostro del personaje principal.
En Leotopía —y dado el carácter exclusivamente divulgativo y lúdico de esta colección descargable—, optamos por un osado ejercicio de reconstrucción facial, tomando como única referencia el aspecto de los demás personajes del mensario, especialmente el del mes siguiente, que comparte con junio muchas características físicas y estéticas.
A buen seguro, la historia de León y el arte universal sabrán perdonar semejante atrevimiento.
Aunque a simple vista el detalle puede pasar desapercibido, ya que tanto el trazo como el color parecen haberse desvanecido de la pared, el protagonista de junio sostiene en su mano izquierda un manojo de lo que bien podrían ser indefinibles hierbas de tallo largo. La derecha se aproxima con una hoz empuñada, en un gesto inequívoco que conduce a la limpieza del campo y al aprovechamiento de la planta.
Es nuestro deseo que el calendario agrícola de San Isidoro para colorear sirva, en esta nueva entrega, para homenajear a todos esos hombres y mujeres del campo que afrontaban con vigor los meses del verano, entre durísimas e interminables jornadas de calor asfixiante. Su empeño, su esfuerzo y el sudor con el que regaban la tierra son motivos más que suficientes para que formen parte destacada del libro de la historia de León. Nuestra historia, al fin y al cabo.
Descarga aquí el calendario agrícola de San Isidoro de León para colorear del mes de junio.
♦